Las zanahorias generalmente se utilizan en ensaladas o como un ingrediente secundario en las distintas preparaciones. En esta ocasión son las estrellas de la receta. De ellas existen registros de hace más de 3000años A.C. en Afganistán e Irán. Se cultivaban por sus hojas, sus semillas aromáticas y ya se sabía de sus propiedades curativas.
Las raíces que eran de color morado se descartaban, recién empezaron a utilizarse, por su sabor dulce, en postres y platos de repostería en la Edad Media pues el azúcar era muy costoso y difícil de conseguir.
Las de tono naranja, que las caracterizan en todo el mundo, aparecieron durante el siglo XVII a instancias de agricultores de los Países Bajos que hicieron pruebas y una gran selección entre los distintos tipos existentes para homenajear a los reyes de la Casa de Orange. Color que se debe al alto contenido de carotenos que tienen y que las identifican.
En el siglo XIX se descubrieron los micronutrientes que poseen y el gran aporte de vitamina A que brindan al organismo. Vitamina muy importante por su poder antioxidante y por la protección que brinda a la vista. Cuentan que durante la segunda guerra mundial se instaba a los aviadores británicos a alimentarse con grandes cantidades de zanahorias para conservar intacta la visión.
Ingredientes:
150grs. de azúcar.
150grs. de manteca blanda.
150grs. de zanahorias ralladas.
1 cebolla grande picada.
3 huevos.
2 cucharaditas de sal fina.
350grs. de harina 0000.
2 cucharaditas de polvo de hornear.
100cc. de leche.
2 cucharadas de Ketchup.
1 cucharada de salsa de soja
Orégano, pimienta blanca y ají molido a gusto.
Guarnición:
Latas de choclo, arvejas, palmitos, jamón y queso, mejillones etc.
Preparación:
Saltear la cebolla y condimentar con ají molido y orégano. Dejar que se enfríe.
Batir las claras a punto nieve y reservar. En otro recipiente y de mayor tamaño ubicar la manteca y el azúcar y mezclar con la batidora hasta lograr una crema.
Agregar el Ketchup, la sal, la pimienta y las yemas de una a la vez sin dejar de batir. Añadir la cebolla y la zanahoria rallada y perfumar con una cucharada de soja.
Cambiar la batidora por una espátula o cuchara de madera y empezar a incorporar con un tamiz la harina mezclada con el polvo de hornear, intercalando con la leche y las claras a nieve.
Enmantecar y enharinar un molde de budín inglés de 28cms o similar (usé uno semicircular de igual tamaño) y volcar la preparación.
Emparejar la superficie, en esta oportunidad no la espolvoree con ningún producto pero pueden hacerlo con queso rallado o azúcar negra o pan rallado mezclado con semillas de sésamo.
Cocinar en horno moderado de 35a 40minutos.
Retirar del horno, dejar descansar 10 minutos y desmoldar.
Presentación:
Ubicar en el centro de la fuente elegida y rodear a gusto con los productos seleccionados. Usé arvejas y choclos salteados y condimentados a gusto; palmitos y mejillones rociados con jugo de limón y rollitos de jamón y queso.
Dejen volar la imaginación.
Es una entrada distinta y muy sabrosa, compañera del pan de cebolla que presenté hace unos meses.
A los Papás les deseo muchas Felicidades y para todos: Feliz Día de la Bandera.
La abuela Martha
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